Hoy vamos a abordar un tema crucial y muy interesante: los implantes dentales en personas de la tercera edad.
Existe la creencia común de que la edad es un factor determinante que impide este procedimiento. Sin embargo, como veremos a continuación, la realidad es mucho más matizada.
La Condición de Salud, No la Edad, es la Clave
Contrario a lo que muchos piensan, la edad no es el factor predominante para decidir si se pueden colocar implantes dentales. Lo más importante es la condición de salud general del paciente. La edad en sí misma no es el factor condicionante y determinante para decir que habrá un problema odontológico.
Aunque es cierto que, a medida que envejecemos, las respuestas metabólicas pueden disminuir un poco, en general, el metabolismo no se ve tan gravemente alterado por la edad. Lo que realmente influye es el estilo de vida que lleva la persona y qué tanto se ha cuidado. Por lo tanto, el punto clave es mantener hábitos saludables.
Un paciente adulto mayor que goza de buena salud puede ser tratado y se le pueden colocar implantes. De hecho, se han tratado pacientes de hasta 87 u 88 años, dependiendo de la condición de salud y la evaluación de riesgo y beneficio. La edad por sí misma no condena a una persona a perder sus dientes naturales; los problemas suelen estar más relacionados con malos hábitos.
Contraindicaciones Absolutas: ¿Cuándo NO se pueden colocar Implantes?
Aunque la edad no es la limitación, ciertas patologías o situaciones médicas sí son contraindicaciones absolutas para el procedimiento:
- Diabetes No ControladaUna diabetes no controlada es una contraindicación absoluta. El paciente tiene que estar diagnosticado y bajo control con su médico. Es importante destacar que los pacientes diabéticos sí pueden ser tratados, pero esto requiere una gran colaboración de su parte: adaptar el estilo de vida, mantener una buena dieta, peso adecuado y excelente higiene bucal.
- Enfermedad Periodontal ActivaSi la enfermedad periodontal (que daña el hueso que soporta los dientes y causa inflamación de las encías) está activa, no se pueden colocar implantes. Esta condición debe tratarse primero.
- Uso de Bifosfonatos o AlendronatoEstos medicamentos, utilizados para combatir la osteoporosis, afectan el metabolismo del hueso. Los pacientes en tratamientos activos con estos fármacos no son candidatos inmediatos; es necesario suspender el medicamento por un tiempo, siempre bajo la supervisión y aprobación del médico tratante.
Nota: La osteoporosis como tal no es una contraindicación absoluta, a menos que esté muy avanzada. La restricción suele ser por el medicamento.
- Radiación en la ZonaLos pacientes que han recibido radiación a menudo no son candidatos porque los vasos sanguíneos más delgados (capilares) colapsan. Esta falta de irrigación dificulta enormemente la integración del implante con el hueso.
Cambios Orales Asociados a la Edad y Cómo Prevenirlos
A medida que el paciente avanza en edad, sí se producen cambios naturales en los tejidos dentales y periodontales. Estos son los más comunes y sus soluciones:
Exposición de las Raíces (Recesión Gingival): Las encías tienden a bajar un poco, exponiendo la zona del cuello de las raíces dentarias. Esto requiere un cuidado especial con la higiene bucal, porque la raíz es mucho menos resistente a la caries.
Disminución del Flujo Salival: Al haber menos saliva, la boca está más seca, lo que expone al paciente a caries dentales. Si se detecta esta disminución, puede ser necesario intervenir usando saliva artificial o hidratadores bucales.
Atrición Fisiológica: Los dientes se van desgastando por el uso a lo largo del tiempo. Esto es normal hasta cierto punto, siempre y cuando no haya una patología oclusal asociada.
Estos cambios ocurren, pero no condenan a una persona a tener una mala dentadura. Con buena higiene, dieta y salud, la situación es perfectamente manejable mediante la prevención y limpiezas periódicas.
¡Mejora tu Calidad de Vida! Los Beneficios de la Rehabilitación Bucal
El principal beneficio de colocarse un implante o realizar una rehabilitación bucal es la mejora integral de la calidad de vida del paciente en tres aspectos fundamentales:
1. Aspecto Funcional
Un paciente rehabilitado logra una mejor masticación, lo que conduce automáticamente a una mejor nutrición. Al triturar mejor los alimentos, se aprovechan más los nutrientes. Se ha demostrado que las personas que rehabilitan su dentadura a menudo recuperan un peso saludable al poder comer una dieta más balanceada.
2. Aspecto Psicológico y Emocional
Los pacientes se revitalizan al tener una sonrisa saludable. Esta mejora estética se refleja en su entorno social: las personas vuelven a sonreír con confianza, eliminando la vergüenza o el malestar por el deterioro dental. Sentirse bien con uno mismo es vital a cualquier edad.
3. Aspecto Recreacional
Las personas pueden volver a disfrutar de sabores y alimentos que extrañaban porque su capacidad para masticarlos había disminuido. Dado que comer es un gran placer, recuperar la capacidad de saborear todo tipo de alimentos es una de las grandes virtudes de estos procedimientos.
En Resumen
Los implantes dentales son una excelente opción que no debe descartarse en la tercera edad. No es la edad lo que restringe las posibilidades, sino la condición de salud. Siempre hay posibilidades de mejorar la calidad de vida y la salud bucal.